ORAR CON LOS MÁRTIRES OBLATOS.
Seis días con los Mártires Oblatos,
de la mano de San Eugenio
Selección de textos breves para leer y orar con S. Eugenio y los Mártires Oblatos
Por Joaquín Martínez y Frank Santucci
Selección de textos breves para leer y orar con S. Eugenio y los Mártires Oblatos
Por Joaquín Martínez y Frank Santucci
DIA 3
La oblación en comunidad atrae a otros
“El celo ardiente por la salvación de los hombres”
y la fuerza de la oblación fue lo que atrajo
a otros a unirse a él. En la medida que su vida se convierte en irradiación
del amor de Dios, en esa misma medida atrae a los demás. Basta pensar a los
casi trescientos jóvenes que se reunían en torno a él dos veces por semana, a
sus primeros misioneros que se unieron a él en 1815 para difundir el Evangelio
por las aldeas de Provenza, a los jóvenes que a lo largo de los años se unirán
a ellos para hacerse Oblatos. Hoy, en calidad de Santo canonizado, continúa
siendo una fuente de inspiración para nosotros, nos lleva de la mano a esa
fuente de energía que es el amor de Dios. Eugenio insistía siempre a sus
Oblatos que, antes de anunciar a los demás “quién es Jesucristo”, tenían que
identificarse con Él. La vocación de los Oblatos era llegar a ser “oblatos” en
el pleno sentido de esta palabra tal como él la entendió y la vivió: “Oblato”
cada uno personalmente y “Oblatos” en comunidad.
Testimonio de los Mártires
(Los expulsaron del convento) y, “siguiendo las
indicaciones de los Superiores, cada uno buscó refugio en casas particulares de
familiares o conocidos, permaneciendo en esa situación (de clandestinidad)
hasta el mes de octubre de 1936. Durante ese tiempo, tanto el P. Esteban, como
el P. Blanco y el P. José Vega, arriesgando sus propias vidas, procuraban
visitar a los escolásticos en la clandestinidad, animándoles en su fidelidad y
compromisos religiosos. Como hecho concreto, recuerdo haber oído al P. Porfirio
que el día 12 de octubre, festividad de Nuestra Señora del Pilar, patrona del
Escolasticado, se reunieron algunos de los Siervos de Dios, y que después de
pasar varias horas en adoración al Santísimo, que clandestinamente guardaban, a
la caída de la tarde comulgaron lo que habría de ser el Viático”. (Fortunato
Alonso, OMI).
Otro
testimonio: “Le pregunté (a mi hermano Clemente) cómo estaba de ánimo y me dijo:
‘Estamos en peligro y tememos que nos separen; juntos, nos damos ánimo unos a
otros. Con todo, si hay que morir, estoy dispuesto, seguro de que Dios nos dará
la fuerza que necesitamos para ser fieles”. (Josefa, religiosa de la Sagrada Familia de Burdeos)
Pausa,
silencio para interiorizar…
Oración final para todos los días
Dios
todopoderoso y eterno, que concediste a Francisco Esteban y a sus compañeros
Mártires la gracia de entregar su vida por Cristo mediante la oblación cruenta;
ayúdanos en nuestra debilidad para que también nosotros, por su intercesión y
siguiendo su ejemplo, nos mantengamos firmes en la fe y sepamos dar la vida por los demás mediante
“el martirio de la caridad”, según la consigna de San Eugenio de Mazenod; y de
este modo podamos testimoniar ante el mundo quién es Jesucristo. Te lo pedimos,
por la intercesión de nuestra Madre María Inmaculada, por Jesucristo nuestro
Señor.
R/.
Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario