sábado, 26 de septiembre de 2015

Juan Wauthier, 5º Mártir Oblato de Laos


El Padre Juan Wauthier, o.m.i. 
(1926 – 1967)
Mártir de la caridad en Laos,
murió por la fe el 16 de diciembre de 1967 en Ban Na 

“El misionero es el hombre de la caridad: para poder anunciar a cada uno  Dios lo ama y que él mismo puede amar, tiene que dar pruebas de caridad hacia todos, entregando su vida por el prójimo” (Juan Pablo II, Encíclica  Redemptoris Missio, n° 89). 
Este es el mejor resumen de la vida del P. Juan Wauthier, Oblato de María Inmaculada.
Había ido a pasar dos días con los catecúmenos del pequeño pueblo de Ban Ban. A 800 metros de allí había un pequeño puesto militar. Los que querían quitarle la vida simularon un ataque de la guerrilla. Inmediatamente salió del poblado, porque en esa región en guerra permanente, siempre había que estar prontos para huir a la selva. Toma consigo a los dos niños que vivían con él y a tres catecúmenos, y los pone al seguro en una hondonada, recomendándoles: “No os mováis, no tengáis miedo, rezad”, les dijo. Él se aleja para darse cuenta de la situación y camina un poco rezando el rosario. Los muchachos oyeron: “Matad al Padre”. Se oyó un disparo. Herido al cuello, el misionero suplica a sus agresores, agazapados detrás de un seto: “¿Por qué me disparáis? ¡Parad! ¡Me duele mucho!” “¡Cállate!”, le contestan, y se reanuda el tiroteo. Recibe tres balas en todo el pecho, y se desploma. Los muchachos huyen aterrados.
El P. Juan Wauthier acaba de dar su vida para que el Evangelio sea fecundo en Laos.
Sigue...

jueves, 3 de septiembre de 2015

Vicente L'Hénoret, 4º Mártir Oblato de Laos



Un Bretón entre los Thaï Deng

El Padre Vicente L’Hénoret, o.m.i.
(1921 – 1961)
Testigo de Jesucristo en Laos
 asesinado por la fe el 11 de mayo de 1961 en Ban Ban, Laos

 El jueves 11 de mayo de 1961por la mañana le vieron salir de Na Thom en bicicleta a las 7, como había dicho a sus parroquianos. Poco después, entre Ban Na Thom y Ban Faï (ບ້ານຝາ), le echaron el alto tres hombres vestidos con el uniforme de la guerrilla. Una campesina que estaba trabajando en el campo, fue testigo de la primera parte de la escena: el Padre sacó un papel, el salvoconducto sin duda. Eso pareció bastar a los militares , pues el Padre se montó de nuevo en su bici y reanudó el camino.
La campesina no vio la secuencia, pero oyó poco después unos disparos; no el dio importancia al hecho, porque eso se había convertido en normal. Sin embargo, al volver al pueblo vio la bicicleta, después entrevió un cuerpo apenas disimulado  en una zanja. Llena de miedo, no se atrevió a decir ni a hacer nada por el momento. Al día siguiente, un grupo de aldeanos fueron a ese lugar. A unos 1500 metros del pueblo vieron un charco de sangre en medio del camino y encontraron el cuerpo del Padre que había sido arrojado en una zanja más lejos en el bosque. Asustados, tan sólo lo cubrieron con un poco de tierra y ramaje. El sábado fueron en busca del P. Khamphanh, y con él procedieron a darle digna sepultura pero de prisa, sin diferir porque todos eran conscientes del peligro. Colocaron una cruz sobre la tumba.
Nunca se dio una explicación de este asesinato. Las autoridades militares presentes en la región optaron por negarlo pura y simplemente; incluso sus aliados neutrales no tuvieron el valor de reconocer los hechos, menos aún de imputarlos a los autores.
Según un testigo, que posteriormente vivió algunos años en Na Thoum, los nuevos amos derribaron la iglesia y prohibieron a los cristianos toda reunión. Las generaciones jóvenes ya no pudieron ser catequistas; no conoce más que la escuela y la propaganda, y ya no saben qué es la religión cristiana.
Los motivos del asesinato
A propósito  de la muerte de Vicente, se ha buscado saber cuál fue el motivo de su muerte: ¿se quería eliminar con él lo que quedaba de la presencia francesa en la región?
Para los testigos que vivían en aquel lugar en la época, hay ninguna duda: estaba claro que era el sacerdote y no el extranjero lo que querían eliminar. En este sentido, después de más de 40 años, el Padre Khamphanh sigue sosteniendo eso mismo: Vicente encontró la muerte de ese modo porque era un sacerdote católico. Es a él a quien acechaban, es a él a quien tendieron la emboscada. Esto lo ha confirmado Mons. Louis-Marie Ling, obispo de Paksé, que conoció personalmente a Vicente durante la infancia y que conoce bien la región de Ban Ban: “Yo creo que ha sido asesinado por odio a la religión y, especialmente, a la religión católica.”
Cuando murió Vicente L’Hénoret, Sor Jeanne Vicent estaba en el convento. Ella relata lo que ha dicho después aquella a la que ella su abuela –una familiar que la ha criado:
Los soldados que le dispararon eran mercenarios, que había sido pagados (por los nuevos amos de la región) para hacer eso. Los hombres que mataron al Padre hablaban vietnamita entre ellos, al igual que los otros militares. A esa gente no le agradaban los sacerdotes franceses.
El Padre Khamphanh vino después y dormía en la casa del Padre Vicente. Los militares dijeron: “Ese no tiene miedo… ¿Es que quiere morir como su hermano mayor?” Eso lo oyó el cocinero, y la gente comprendió claramente que era una amenaza. Entonces el Padre Khamphanh tuvo que irse, ya no pudo dormir más en la casa. No mataron al Padre Vicente porque era un francés, sino porque no les agradaba la religión,  y aún menos los sacerdotes. Estoy segura de esto: si no, ¿por qué amenazaron  también al Padre Khamphanh (que era laosiano)?
Para saber más, ver el enlace (link) siguiente:
http://joaquinmartinezomi.blogspot.it/2015/09/un-breton-entrelos-thai-deng-el-padre.html


El Misionero Mártir ante su "iglesia-catedral" de Ban Ban, Laos