Engracia, en su cumple, acoge con gozo en su casa a un grupo de Oblatos.
Ver en Nosotros OMI, 26.06.2013: http://www.nosotrosomi.org
Engracia es natural y vecina de
Pozuelo. Acaba de cumplir sus 90 abriles ¡Enhorabuena, y que cumpla muchos más! Sigue con la mente lúcida, su perenne sonrisa y tan acogedora como siempre. Desde niña conoció a los Oblatos de Pozuelo y
ha mantenido una estrecha relación con ellos, con quienes se sentía y se siente
como en familia. También ellos la han sentido tan de casa, tan de la Familia
Oblata, tanto a ella como a su esposo, Javier Negro, que han querido patentizar
esa relación nombrando a ambos “Oblatos Honorarios”.
Engracia, con trece
años de edad, fue testigo ocular de cómo los milicianos, al ocupar el convento,
arrojaban a la calle las imágenes, ornamentos sagrados y otros objetos de culto
para darlos en pasto a las llamas.
Recuerda perfectamente
quiénes fueron los cabecillas de aquel vil allanamiento de morada y del subsiguiente
encarcelamiento y ejecución de los Mártires. Da incluso los nombres (que
omitimos, lógicamente, por discreción y caridad cristiana, siguiendo el ejemplo de los Mártires, que murieron perdonando). Léase a continuación su
testimonio.